viernes, 30 de noviembre de 2012

DESDE EL AÑO 2000 AL 2011 EL SECTOR HA VISTO PERDER MÁS DE 100 MIL EMPLEOS FORMALES: UNO DE CADA 5.

LAS OBSERVACIONES FUERON PLANTEADAS DURANTE EL PANEL “50 AÑOS, 5 DÉCADAS, UNA INDUSTRIA”.
SANTO DOMINGO.- La sobrevaluación de la tasa de cambio, la informalidad en el mercado, el cambio constante en las reglas de juego en el sector eléctrico, los altos costos en el transporte de carga, las pocas facilidades crediticias y la alta carga laboral, figuran entre los principales escollos que actualmente impiden que el sector industrial se coloque en condiciones de competitividad frente a los socios comerciales del país.

Las observaciones fueron planteadas durante el panel “50 años, 5 décadas, una industria”, realizado ayer en el hotel Jaragua durante el almuerzo con que la Asociación de Industrias de la República Dominicana celebró sus 50 años de fundación.

 Teniendo como panelistas a Roberto Bonetti Guerra, vicepresidente ejecutivo de la Sociedad Industrial Dominicana; Franklin Báez Brugal, presidente de Brugal & Compañía; Elena Viyella de Paliza, de Monte Río Power Corp; Manuel Estrella Cruz, del Grupo Estrella, y Franklin León Herbert, de la Cervecería Nacional Dominicana, bajo la moderación de la periodista Alicia Ortega.

Al dejar abierto el evento, la presidenta de la AIRD, Ligia Bonetti Du-Breil, aseguró que en el año 2000 el empleo formal en el sector industrial ascendía a 505 mil personas, y que para el 2001 la cifra se redujo a 400 mil.

“Esto indica que a pesar del crecimiento sostenido que ha tenido nuestra economía, hemos perdido más de 100 mil empleos formales en el sector manufacturero en los últimos 10 años, esto es, 1 de cada 5 empleos”.

Al alertar sobre la pérdida de empleos en la industrial, la presidenta de la AIRD puntualizó que “un nuevo empleo en el sector  de la manufactura genera varios más en los sectores de servicios, pero un empleo que se pierde en ese sector tiene un efecto multiplicador negativo, incrementando el empleo informal.

Trabas y competitividad

Al tocar el tema de la competitividad, aspecto en el que básicamente se centró el panel, la presidenta de la AIRD dijo que para que el país sea competitivo “además de mantener sus costos de producción en línea con el de otros productores en el mercado mundial, debe de ir reduciéndolos continuamente e incrementar su productividad sustancialmente”.

Al hablar lo que, a su juicio, son los principales escollos de la industria criolla, Manuel Estrella citó la enorme carga laboral existente y desarticulación en el mercado y en el sector oficial.

Graficó la situación puntualizando: “Carga laboral: 65%; cuando pago cien pesos a una persona en realidad estoy pagando ciento sesenta y cinco: preaviso, cesantía, vacaciones, bonificación, seguro de salud, seguro complementario de salud, seguro social, AFP. El que nos sigue es  Brasil, con 55%, se va degradando: Ecuador, 43; El Salvador, 26; y Chile, 30; España acaba de cambiar de 45 sueldos a 20 sueldos. Hablar de eso aquí es caer en arena movediza”.

Sobre la desarticulación observó que la manufactura no está ligada al turismo, el turismo no está ligado a la agricultura, la agricultura no está ligada a industria, mientras que la industria local y la industria de zona franca son dos mundos apartes.

“La industrial del mueble no le puede vender muebles a un hotel porque a los hoteleros le conviene más traer los de fuera libres de impuestos; el sector industria no va al campo porque el campo ni se financia ni se asegura y le conviene más traer bienes intermedios sin producir: le pasó con el maní, pasó con el algodón, pasó con el tabaco rubio y la soya, y hoy pasa parcialmente con el maíz y el tomate”.

Muchas instituciones que dependen en teoría de Industria y Comercio tienen consejos directivos y vidas propias, y toman sus propias decisiones. Citó entre ellas el Centro de Exportación e Inversión de República Dominicana y Pro Consumidor, apuntando la necesidad de articularlas e integrarlas.

También citó la poca facilidad de créditos, apuntando que hoy en día es más fácil financiar un auto que una maquinaria, lo que, en parte atribuyó a la desaparición del Fondo de Apoyo para la Micro, Pequeña y Mediana Empresa.

Tasa de cambio y electricidad

Al abordar el tema, Elena Viyella de Paliza citó entre los principales escollos la informalidad, el sistema eléctrico y la sobrevaluación de la tasa de cambio.
Sobre el sistema eléctrico recordó que los Acuerdos de Madrid vencen en el año 2016, lo que obliga al país a licitar energía a precios competitivos.

Al respecto, abogó por la inversión de capitales tanto en el sistema en sí como en la distribución y el cobro de la energía servida, así como evitar el cambio en las reglas de juego “a cada momento y de manera individual”.

“El país debe tener solución de energía y una oferta con precios competitivos, donde haya contratos transparentes para financiar inversiones en el sector eléctrico”, subrayó.

Asimismo, observó que el mantener una tasa de cambio sobrevaluada lo que hace es privilegiar las importaciones sobre la industria nacional, por lo que dejó planteada la necesidad de que las divisas tengan un precio acorde a la realidad del mercado.

De cara al futuro

Los panelistas finalizaron sus exposiciones esbozando lo que le depara el futuro a la industria criolla, señalando retos presentes y en el mañana.

Bonetti Guerra apostó porque se trabaje para eliminar la informalidad en el mercado y el sector. “Los esfuerzos que se hacen para aumentar impuestos deben hacerse para eliminar la informalidad en la economía, porque la informalidad es un impuesto a los que pagamos impuestos”.

Báez Brugal abogó por la sinceridad del Estado en cuanto a sus posibilidades reales, señalando que aunque en el país ha habido crecimiento y estabilidad, la disciplina fiscal ha estado en entredicho. “Un déficit de más del ocho por ciento del producto interno bruto, de más de 200 mil millones de pesos, es para preocupar a cualquier persona sensata”.

Elena Viyella apostó por aumentar la capacidad exportadora, a fin de que el país tenga una economía de escala y se pueda competir en igualdad de condiciones.

Manuel Estrella dijo que el futuro es bueno, y señaló el hecho de que el país ha construido una democracia, se disfruta de paz social y se cuenta con una clase empresarial y política madura. Igualmente apostó por aumentar la capacidad exportadora.

León Herbert  alertó en el sentido de que las decisiones que tomen los gobiernos y que puedan afectar a la clase empresarial también afectan a la clase política. Dijo que el empresariado y los que gobiernan deben verse como socios.

Industria es el sector que aporta mayores tributos

Ligia Bonetti afirmó que el sector sigue constituyendo el ancla de la economía dominicana y un importante motor en el desarrollo nacional, ya que aporta más ingresos tributarios que cualquier otro sector. Abogó por una visión del desarrollo que incluya a todo el campo y a toda la industria.

“Si logramos esto, podremos encaminarnos a hacer realidad la Estrategia Nacional de Desarrollo que nos trazamos y generar los niveles de confianza que ahora más que nunca necesitamos para encaminar nuestro país hacia el verdadero desarrollo, sin ataduras, sin miedos, pero con apertura y transparencia, aunque algunos se resistan”.

50 años siglo en medio de cambios de reglas.

Al dar la bienvenida al almuerzo conque la AIRD celebró sus 50 años de fundación, Ligia Bonetti Du-Breil observó que en ese medio siglo la institución “se ha movido en torno a una dinámica de cambios de reglas de juego y esperanzas. 

El optimismo, la apuesta por un país competitivo, el compromiso por ser parte de la construcción de mejores condiciones sociales vía el empleo digno, la defensa de la institucionalidad, la seguridad de que es posible expandir las fronteras vía las exportaciones y ofrecer al mercado interno productos de calidad, son y han sido guías del sector de la Asociación de Industrias de la República Dominicana”.

LOS EXPERTOS:

Manuel Estrella Cruz
PRESIDENTE GRUPO ESTRELLA

“Tenemos que hacer un acto de constricción y ver qué hemos hecho y qué no hemos hecho. Yo creo que debemos mirarnos nosotros mismos, y ver si hemos hecho los esfuerzos necesarios para exportar más”.

Franklin León Herbert
PRESIDENTE CERVECERÍA NAC. DOMINICANA

“Hemos mejorado mucho en lo que se refiere a la libertad de los sindicatos, en la educación del empleado, y para que tengamos más competitividad, los empleado debieran elevar su nivel educacional”.

Elena Viyella de Paliza
PRESIDENTE MONTE RÍO POWER CORP

Para competir hay que tener una mejor educación básica, media y universitaria. Igual que la electricidad, que gravita sobre la competitividad de las empresas, y resolver ese problema es  una obligación”.

Roberto Bonetti Guerra
VICEPRESIDENTE MERCASID

“Las leyes de incentivo a la industria han sido beneficiosas. Cuando no existían todo era difícil, éstas han venido a corregir las deficiencias que tenía nuestro país para que la industria se pudiera desarrollar”.

Franklin Báez Brugal
PRESIDENTE DE BRUGAL & COMPAÑÍA

“Es fácil estar en una situación de superávit fiscal y caer en un déficit fiscal, pero no es nada fácil salir de un déficit y alcanzar un superávit. Los países que han caído en esa trampa han tenido que pagar un precio muy alto para salir de eso”.

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