viernes, 11 de enero de 2013

UN LLAMADO A LA RECONCILIACIÓN ENTRE LÍDERES RELIGIOSOS.

Luego de haber visto el inconveniente entre dos instituciones cristianas, me gustaría hacer una exhortación a la paz, no sin antes aclarar ciertos puntos.

Primeramente, somos cristianos pues le servimos y creemos en el mismo Padre, Hijo y Espíritu Santo. En segundo lugar, aunque adoremos diferente, no dejamos de ser hermanos ya que somos todos hijos de Dios al haber aceptado a Jesucristo como nuestro salvador y redentor. Por lo tanto, deberíamos amarnos, respetarnos e interactuar como tales.

El Papa Benedicto nos ha recordado que "la unidad cristiana es un don de Dios que puede venir a nosotros solamente del Padre mediante el Hijo, porque la iglesia es su iglesia". Al mismo tiempo el gran líder católico enfatizo que debemos "dedicar todas nuestras fuerzas a promover "la unidad visible entre los cristianos separados". 

Así como pide que los cristianos "deben regresar a lo esencial, al corazón de la fe, para dar juntos al mundo un testimonio del Dios vivo, sin olvidar lo que nos une: la fe en Dios Padre y Creador revelado en su Hijo Jesucristo difundiendo al Espíritu Santo que vivifica y santifica".

Líderes cristianos de todas las denominaciones han tratado por anos de traer la paz, de crear la unidad interreligiosa, de crear relaciones de respeto, tolerancia y confianza con creyentes de todas las entidades que proclaman el ejemplo y las enseñanzas de Jesucristo.

En diferentes países y culturas no se hace diferencia entre si eres Católico, Pentecostal, Evangélico, Adventista, Testigo de Jehová, Mormón, Ortodoxo, Metodista, Bautista, Episcopal, Luterano, Presbiteriano, Anglicano, etc. 

Allí todos los antes mencionados serian designados como uno: cristiano. Sus creencias solo permiten ver si eres Cristiano o eres Musulmán, Cristiano o Hindú, Cristiano o Budista, Cristiano o Judío, y demás.

Puedo entender que entre hermanos haya recelo, tergiversación, debilidad, falta de comunicación, falta de perdón y hasta ofensas; sin embargo, eso no debe invalidar el llamado de Jesús a que seamos uno como Él es uno con el Padre.

Hago un llamado de reflexión a las autoridades de lugar a tratar este tema con mucha delicadeza y a no actuar con ligereza ante este pequeño mal entendido entre HERMANOS CRISTIANOS, ya que tenemos FE que más adelante haya una reconciliación, quizás hasta publica, dando así un buen ejemplo a la comunidad en general y a aquellas personas que aún no han dado el paso de fe en sus vidas para que continúen acercándose a Jesucristo sin importar en que iglesia o denominación decidan congregarse.

Juan 17:20-21

No ruego sólo por éstos. Ruego también por los que han de creer en mí por el mensaje de ellos, 21 para que todos sean uno. Padre, así como tú estás en mí y yo en ti, permite que ellos también estén en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado.
 Miguel Angel Arias
Ministerio Sabiduría De Lo Alto
E-mail: Sabiduriadeloalto1@yahoo.com
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