SAN PEDRO DE MACORIS.- Gran
preocupación reina en los residentes del sector Villa Progreso II de aquí,
debido a que los estudiantes y profesores de la escuela Profesor Juan Bosch ubicada
detrás del cementerio, están siendo afectados por el hedor que despide el Campo
Santo.
En ocasiones la
docencia ha sido suspendida por el hedor
que sale del cementerio, luego de que
aparezcan cadáveres destapados en descomposición, lo que pone en peligro la
salud, no solo de los estudiantes y profesores, sino de los pacientes que
acuden a la policlínica que está al lado de la escuela ambas detrás de la Necrópolis
San Pedro Apóstol.
Freddy Lara, presidente
de la Junta de Vecinos del sector, señaló que es preocupante la salud de los
afectados por esa situación, ya que en cualquier momento puede levantarse un
brote de enfermedades.
El dirigente
comunitario pidió al Ministerio de Educación la construcción de una escuela en
los terrenos que le fueron donados por el Consejo Estatal del Azúcar (CEA),
para que se pueda impartir la docencia en condiciones adecuadas y retirado del
cementerio.
PRECARIEDADES
De su lado Niurki Marisol Liriano, presidenta de la
Sociedad de Padres y Amigos de la citada escuela, dijo que la matricula es
de 200 estudiantes y que están laborando
con muchas precariedades.
Señaló que están siendo
afectados además del mal olor que sale del cementerio, por la falta de espacio,
agua potable, solo tienen un sanitario para profesores y estudiantes y demás
personal que labora en el centro educativo, también el calor, ya que parte está
techada de zinc, entre otras dificultades.
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