SANTO DOMINGO.- La sangrienta lista de feminicidios íntimos del año pasado fue superada con las víctimas 98 y 99 del año 2011, caídas a manos de sus parejas en La Vega y Santo Domingo Este.
Se trata de Estefanía Cerra Basora, de 29 años, y Sandra Milagros Angomás, de 28, asesinadas a balazos por sus exparejas que, como en la mayoría de los casos, optaron por darles muerte porque se negaban a reconciliarse con ellos.
Obviando la existencia de niños, el daño a sus familiares y a la sociedad misma, alrededor de 170 hombres han dispuesto de la vida de mujeres en lo que va de año. De esos, 99 mataron a sus parejas o a sus ex por motivos pasionales.
Octubre 2010-2011. Al décimo mes del año pasado el total de feminicidios íntimos era de 78. Sin embargo, este año, cuando el mes apenas pasa de la mitad, hay 21 casos más.
De acuerdo con cifras estadísticas de la Procuraduría General de la República, en cinco de los 10 meses del año la cantidad ha sobrepasado el número de mujeres asesinadas por mes en el año 2010. En junio del 2010 se produjeron seis casos y en junio de este año 15. Lo mismo ocurrió en julio, que se registraron tres feminicidios este año y el año pasado. El comportamiento se reflejó también en agosto, cuando se registraron 13 casos frente a ocho de agosto de 2010. En octubre fueron 8 frente a 6 del 2006 y octubre, que en 2010 totalizó 4 casos y en el año actual ya va por cinco.
Mes conmovedor. Aunque cada mujer que cae asesinada lacera a la sociedad, tres casos han marcado aún más por la frialdad con que han sido cometidos y, casualmente, tres de ellos ocurrieron en septiembre.
El día 10 Carlos Miguel del Toro, de 28 años, asesinó a su esposa Blanca Iris Martínez, de la misma edad, en presencia del hijo de ambos de apenas un año de edad. Cuando se escuchó la detonación, los vecinos acudieron a la vivienda y encontraron al niño llorando con el pañal salpicado de sangre y con un edema en la frente.
El otro caso lastimoso ocurrió el 21 de septiembre cuando Romelio Frías quemó su casa con toda su familia dentro, incluyendo mellizos de 9 años, y una niña de tres.
El cierre de horror lo produjo el caso del alemán Román Buchernaur, quien, agobiado por problemas económicos estranguló a su esposa Rosmery Rivas, de 29 años, a su niña Natalia Buchernaur, de 9 y luego se ahorcó en el residencial Casa Linda de Sosúa, donde se habían instalado hacía pocos meses.
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