Por Aris Palmero. ANALISIS.
Ciertamente el PRD logro una cómoda ventaja frente al PLD su más cercano competidor en el pasado proceso municipal efectuado el 16 de mayo del 2006, logrando el favor del electorado con un 59.57%, frente a un 37.36% del PLD. Es decir, con una astronómica ventaja de un: 20.21% lo que, si no es un record, por lo menos es un gran average.
Ahora bien, este certamen hay que verlo y analizarlo desde diferentes escenarios para poder realizar un símil con el venidero proceso que habrá de generarse el tercer domingo del mes de mayo que, irónicamente, cae justamente un domingo 16, pues con la aprobación de la nueva constitución de la Nación, las elecciones habrán de celebrarse el tercer domingo del mes de mayo, y no como estaba pautado en la anterior que lo era e 16 de mayo sin importar el día que estuviese marcado en el calendario.
La situación para el PRD y su candidato a síndico no es tan fácil y sencilla como muchos piensan. Veamos:
Del 59.57% (34,900 votos) logrados por el PRD un 15.24% correspondieron a sus aliados, entre los que estaba el poderoso aunque fragmentado PRSC. Y del 37.36% (21,891 votos) del PLD, solo el 2.78% fueron emitidos por sus socios. Es decir, que los aliados del PRD marcaron una diferencia de: 12.56%.
Del 59.57% (34,900 votos) logrados por el PRD un 15.24% correspondieron a sus aliados, entre los que estaba el poderoso aunque fragmentado PRSC. Y del 37.36% (21,891 votos) del PLD, solo el 2.78% fueron emitidos por sus socios. Es decir, que los aliados del PRD marcaron una diferencia de: 12.56%.
Este cotejo a simple vista podría parecer sin importancia alguna, mas no es así. De partido a partido la diferencia fue de: 9.75%, pues mientras el PRD obtenía en el municipio un 44.33%, (25,975 votos). El PLD acumulaba un 34.58%. (20,258 votos).
Este 9.75% a favor del PRD puede verse sustancialmente afectado o reducido si tomamos en consideración lo que podría ser un tercer mandato del síndico actual, ahora de seis años. Todos conocemos de la deflación en la simpatía del electorado que sufren los candidatos reeleccionistas. A esto hay que agregarle el disgusto de una gran parte de los perredeistas del municipio por la forma individual en que se comporta su actual sindico y, lo peor aun, lo que podría ser una gran segmentación con la salida casi inminente del equipo político del Dr. D”Leon y de varios dirigentes y de ex candidatos a regidores y diputados que se sienten disgustados con el manejo que se le dio al pasado proceso convencional del partido.
En cambio el PLD en esta ocasión luce mas compactado sin problemas internos y dispuestos a echar la pelea por la sindicatura municipal. Rumorándose de que el presidente Fernández estaría dispuesto a realizar la inversión que fuese necesaria y ha reeditar el cuestionado comportamiento político que exhibió en las pasadas elecciones presidenciales, con la finalidad de desplazar al sindico perredeísta de tan importante posición.
Si la situación de partido a partido (PRD-PLD) es compleja, la de los aliados o socios de ambas agrupaciones políticas lo es aún mucho más. Para muestra un simple bosquejo: de los siete partidos aliados del PRD que les aportaron un 15.24%, entre los que estaban el PRSC con un 8.13%, el PQDC un 1.81%, el PUN con 2.47%, y el PNVC con un 0.66, luce hasta el momento que, de estos aliados solo dos de ellos se mantendrán en el PRD. Esto indica que un 14% de los votos que en el 2006 fueron a parar a las urnas blancas, el próximo 16 de mayo cambiarían de color.
Un elemento que no debe dejar de tomarse en cuenta es la participación de agrupaciones que, como el BIS y la UDC que son partidos aliados al gobierno PELEDEISTA participaron con sus propios candidatos municipales. Estos partidos obtuvieron el 1.70% de los sufragios, caudal este que, obviamente, iría a engrosar los votos de las urnas moradas en las próximas elecciones, ya que todo parece indicar que en esta ocasión no presentaran candidaturas propias.
Al PRD solo le quedaría una virtual alianza con los alicaídos PDSC, MIUCA, PRI Y PHD organizaciones estas que en su conjunto obtuvieron un escaso y pírrico 1.38% de los votos sufragados.-
Este razonamiento nos lleva a la conclusión de que el escenario de las elecciones municipales de mayo próximo es diametralmente diferente al anterior. Pudiendo el PLD ahora capitalizar el descontento PERREDEISTA, el desgaste REELECCIONISTA y aglutinar a su alrededor no solo a los otroras aliados PERREDEISTAS que les sumaron el 15.24%, sino, inclusive, a varios de los que siendo sus aliados nacionales participaron a nivel municipal separados, obteniendo, como hemos dicho un 1.70%.Ejercicio matemático: 59.57% PRD y aliados-PRD- solo- 44.33%Diferencia: 15.24% Aliados.PLD y aliados 37.36%PLD –solo- 34-58%Diferencia 2.78% Votos aliados.
Si el PLD logra una coalición con estas agrupaciones, incluyendo al PRSC, como parece ser que esta previsto, podríamos colegir de que a su 34.58% se les agreguen el 2.78% de sus alaidos naturales e incondicionales, mas el 1.70% del BIS y la UDC, mas un 13.% de sus ya casi socios PRSC, PQDC, PNVC, entre otros, tendríamos que fácilmente el PLD podría obtener sin mayores incovenientes un 56.% del favor del electorado y, naturalmente, alzarse con el triunfo municipal. Esta cifra podría aumentar dependiendo del manejo que el PLD le de a la escisión interna del PRD y al impacto que en el electorado causarían sus nuevos aliados.-
Al PRD, si es que realmente le interesa seguir con el dominio de la plaza municipal, no le queda otro camino que trabajar duramente para lograr su unidad interna. Conformar una boleta municipal atractiva y seleccionar un candidato (a) a Senador (a) que pueda articular un buen discurso en contra del candidato foráneo del PLD. El PRD debe, de igual manera, aperturarse y buscar una alianza con los sectores populares, progresistas, de avanzadas y democráticos. Es decir, matrimoniarse con el seno de sociedad, fuente inagotable del otrora poderío del partido del jacho prendió. De lo contrario, el reinado PERREDESITA en el municipio y las aspiraciones de recuperar la plaza política perdida desde el año 1982, podrían verse frustrados.-
Un dato sumamente importante lo es el de la abstención electoral municipal. De los 120.757 (Ciento Veinte Mil Setecientos Cincuenta y Siete) electores inscritos en el municipio de San Pedro de Macorís, solamente fueron a las urnas: 61,096 (Sesenta y un Mil Noventa y Seis) ciudadanos(as), para un: 50.59% votantes. Siendo la ABSTENCION O APATIA de un: 49.41%, un porcentaje record. Esta cifra conduce a la conclusión de que el 50% del electorado del municipio de San Pedro de Macorís, no se intereso por ningunas de las propuestas que les formularon los candidatos(as), los partidos y agrupaciones políticas que participaron en el proceso electoral, lo que es sumamente preocupante. Las puertas de un Movimiento Municipal aglutinador que se identifique con las verdaderas y reales necesidades de los series 23, están abiertas de par en par.
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