SANTO DOMINGO.- El Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (CODUE), expresó su “honda preocupación por la intranquilizante situación nacional, el desempleo, falta de valores; la violencia, la vulnerabilidad de la Justicia, el clientelismo político, el alto costo de la vida, el narcotráfico, lo que está creando un creciente espiral de criminalidad y muerte; sin embargo, esta desalentadora situación no tiene que ser irreversible, puede ser una oportunidad”.Durante la celebración de su XVII Asamblea anual, con la presencia de delegados representantes de más cinco mil iglesias e instituciones miembros, el CODUE proclamó que “la Navidad es un tiempo propicio para reflexionar sobre el cambio que necesita la nación, tiene que ser un espacio privilegiado para la convivencia familiar estos días debían tener un significado profundamente familiar”.
Dijo que “tiempo de reunión, de conmemoración; tiempo de recuerdo por los sitios vacíos en torno a la mesa, no solos por lo que se ha ido, sino por lo que se ha roto, la verdad que el panorama”.
Deploró que aumentan familias cada vez más rotas, más desunidas, matrimonios destruidos; hijos que viven con dolor silenciado por el trauma y el drama de la separación de sus padres ,familias sin horizontes ; todos los miembro de la familia debemos revaluar nuestro rol para realizar un mejor aporte a su equilibrio y armonía.
“Lamentamos que la Navidad se haya convertido en un pretexto, en una fiesta paganizada más que secularizada, consagrada al nuevo becerro de oro que es el consumismo más absoluto. La fecha ha adquirido un total sentido comercial, sin freno aparente y un tiempo marcado por el predominio de lo material”, señala el CODUE.
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