jueves, 12 de mayo de 2016

BAHIA DE LAS AGUILAS EL PARAISO TERRENAL QUE USTED DEBE VISITAR.

SAN PEDRO DE MACORIS, BAHIA DE LAS AGUILAS, PEDERNALES, RD.- El domingo primero de mayo un selecto grupo de  petromacorisanos tuvieron la oportunidad de conocer los encantos de la Región Sur, con la excursión Bahía de las Aguilas un Paraiso Terrenal; organizada por el programa Radial Milenio Caliente que se transmite de lunes a viernes por Radio FM-103 en San Pedro de Macoris.

Pasada las 3 de la madrugada del Feriado del Trabajo, iniciamos el extenso recorrido desde el municipio de San Pedro de Macoris al municipio de Pedernales. Unos 400 kilómetros en un cómodo autobús de la Compañía de Transporte Astrapu.
Jóvenes, niños y adultos en un ambiente familiar, cómodamente sentados inclinan sus rostros para elevar una plegaria al Dios todo poderoso, para que nos cubra con su manto sagrado y nos permite ir y volver de esta larga travesía.

La vía está despejada en el tramo San Pedro a Santo Domingo, el autobús se desplaza con gran estabilidad, vamos con un conductor que conoce muy bien la ruta, el agua, las meriendas y el desayuno están en el maletero del autobús. Próximo a la 7 de la mañana está previsto el desayuno en el malecón de Barahona.
Llegamos a Barahona, muchos que cayeron vencidos por el sueño están despertando, aunque el autobús realizo par de breves paradas, nos acercamos a la primera parada oficial de la excursión.

Todos descienden del autobús, llego el momento del desayuno preparado por la Panificadora Crisellys y la realización de la foto oficial de este histórico momento. Llegar a Bahía de las Águilas es una experiencia  que muchos quieren vivir, ahora que el área mantiene sus encantos naturales.
Leo Martinez, que es el anfitrión de la excursión y productor del programa Milenio Caliente, consulta con el guía que se integro en Santo Domingo y el conductor del autobús para proyectar a la hora que estarán arribando a Cabo Rojo, para luego accesar a Bahía de las Aguilas. Estamos a unos 140 kilómetros en unas 3 hora estaremos llegando, por lo estrecha de la vía y lo grande que es el autobús. A partir de ahora vamos a menor velocidad y con mucho más  precaución, señala el conductor.

Los excursionistas están desayunando, otros están caminando para estirar los músculos. Ellos no conocen Bahía de las Águilas, atraídos por la curiosidad algunos vinieron  desde New York y otros atraídos por los comentarios de la organización y facilidades abordaron en la capital. El grueso del grupo es de la Serie 23. Algunos nos acompañan por primera vez.
Todos los detalles están bien coordinados con una reconocida empresa de la capital, que realiza la travesía con regularidad. Es momento de la primera parada en el trayecto Barahona a Pedernales en el poblado de los patos, para realizar algunas necesidades.

El parque energético Aeolico Larimar concentra la atención, las enormes aspas con sus movimientos produciendo energía eléctrica a distancia llama la atención. Una breve parada es necesaria a la entrada del parque para usar los celulares y captar las imágenes.
Avanzamos hacia el destino final, la lluvia se está dejando sentir y meteorología anuncia lluvias en Pedernales de las 11 de la mañana en adelante, el cielo está nublado. Una leve llovizna continua nos acercamos a la Laguna de Oviedo, donde realizamos la próxima parada.

Son casi las 11 de la mañana el programa establecido se está cumpliendo sin contratiempos, nos aproximamos a Cabo Rojo. Llama la atención el color rojizo  de sus tierras. El guía informa que dejaremos la carretera a Pedernales para dirigirnos al puerto de Cabo Rojo, a su playa y ahí abordar una embarcación para navegar unos 15 minutos, bordeando la costa hacia Bahía de las Águilas.
La comunicación para el almuerzo buffet con la administración del restaurant se realiza; ¿Comemos antes o después de Bahía de las Aguilas? La mayoría acepta después. El cielo está despejado la lluvia queda atrás, el día es propicio para estar en la playa.

Llegamos a la playa Cabo Rojo, una gran cantidad de autobuses procedentes de diferentes puntos del país están estacionados en el parqueo. Se iniciaron los preparativos para abordar varias embarcaciones para el traslado al Paraíso Terrenal, el momento de conocer Bahía de las Aguilas se acerca. Todos están deseosos de conocer tan publicitado lugar.
Las blancas arenas de la playa de Cabo Rojo y la transparencia del agua, presagia que vamos hacia la playa de aguas más claras de la República Dominicana. Estamos en Bahía de las Águilas que cubre un extenso tramo de playa, donde hay varios grupos de personas bañándose.

El largo trayecto recorrido ha valido la pena, el esfuerzo y la inversión esta compensado, estamos frente a un lugar paradisíaco. Una playa única y bella, apta para un baño  placentero.  Se está viviendo una experiencia nueva y muy gratificante. Solo hay una queja, aquellos que no pudieron venir se han perdido la oportunidad de estar en un Paraíso Terrenal.
Son las 3.45 de la tarde llego el momento de retornar a la Playa de Cabo Rojo para el almuerzo buffet. La lanchas están ahí, llego el momento de abordar, el trayecto es de unos 15 minutos. A los excursionistas les espera una gran sorpresa. El buffet es VIP.

Todos están sentados, el personal del restaurant está colocando el buffet para el grupo del Milenio Caliente que está allí desde la Serie 23 San Pedro de Macoris. Leo Martínez está coordinando los detalles con la administración, el hambre se está apoderando de los presentes.
El propietario del establecimiento está coordinando personalmente el servicio, para el negocio es importante que este grupo compuesto por empresarios, profesionales, comerciantes y distinguidas personalidades quede complacido.

El buffet está servido es la señal que todos esperaban, un variado manjar de langostas, langostinos, camarones, lambí, pulpo, arroces, ensaladas variadas, pollo, paella de mariscos, mofongo de mariscos y pollo forman parte de la variada propuesta culinaria. Todos comen a satisfacción, la comida es excelente.
Llego el momento de partir hacia el último destino, Pedernales. Vamos a conocer la puerta de la patria que está allí. Estamos a unos 13 kilómetros, el guía señala que veremos el parque, el área fronteriza con Haití y el Balcón de Pedernales. Que no tienen malecón, sino que tiene un mirador que sirve de balcón para ver el mar Caribe.

A las 6 de la tarde abandonamos bajo una pertinaz llovizna la ciudad de Pedernales hacia San Pedro de Macoris. Acompañado durante todo el trayecto hasta Barahona  por un fuerte aguacero. Los excursionistas en el trayecto recibieron variados  premios y regalos, radios, palitos para selfie, tickets para la próxima excursión y otras sorpresas.

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