EL NUEVO DIARIO, EEUU.-
Las razones del bajo rendimiento ofensivo del dominicano Robinson Canó al
parecer no están relacionadas a su mecánica con el madero, según las
declaraciones que ofreció el intermedista a un medio estadounidense.
La muerte de su abuelo,
así como problemas estomacales son los motivos por los cuales no ha podido
enseñar su bate el intermedista que costó a los Marineros 240 millones de
dólares, explicó el propio jugador durante una entrevista para el diario USA
Today.
Sobre la muerte de su
abuelo, Canó expresó: “A veces bebo agua y me dan ganas de vomitar. No puedo
comer de la forma que lo hacía antes. A veces solo como una vez antes de comer
porque me siento lleno y uno no tiene la misma energía.
En lo que va de
temporada, Canó batea para promedio de .248, con cinco jonrones y 27
remolcadas.
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